Por aquel entonces, los 'Juniors de Oro' preparaban el Europeo de Polonia, tras una gran imagen en los JJOO de Pekín, en un duelo memorable ante los estadounidenses. Con Scariolo al mando del banquillo España ganaría tres medallas (dos oros en europeos y la plata de Londres). Sin embargo, existe una espinita clavada con fecha de 2010 y ubicación en Turquía. En ese Mundial, España cuajó su peor resultado en los últimos diez años: fue sexta, golpeada por ese triple de Teodosic delante de Garbajosa.
La conjura de la plantilla tras el Mundial otomano fue clara: "en el de España estamos todos y vamos a por el oro".

La selección ha cumplido con su palabra y no falta ni una estrella, por muchas trabas que pongan los equipos NBA a los nuestros. La ilusión es máxima y, por primera vez (seamos francos), las opciones de Oro son más reales que nunca.