Ante este panorama, Mourinho salió con su once de gala, con Kaká y Özil juntos más Higuaín por el lesionado Benzema. El Madrid no practicó un fútbol excesivamente alto, pero gana ante cualquier situación, campo y rival. Y sigue con una media de goles bestial, camino de hacer historia.
El Betis, por su parte, discutió la posesión al Madrid, y nunca bajó los brazos. Fue, y bastante evidente, perjudicado por el colegiado, que no vio una mano de Ramos al final y otra anterior de Xabi, aunque bien es cierto que tampoco se pitó una de Ruben Castro en el primer gol del Betis.
Manda el Betis y contesta el Madrid.
Un tanto que llegaría muy pronto, en el minuto nueve, cuando el partido predecía lo que iba a ser durante su totalidad: no había dueño ni medio campo, estilo Premier. Así, y tras ese control polémico de Ruben Castro, el balón le llegó a Jorge Molina, que fusiló a Casillas sin contemplación.
El Madrid se encontraba con un resultado inesperado y demasiado tempranero, que acabó derivando en un partido loco y atractivo, aunque negativo para los entrenadores, siempre valedores del control y la táctica. Hoy primo más la imaginación y la velocidad.
Tras el gol de Jorge, el Betis se erigió como dueño del partido, aunque receloso de las contras y la calidad del Madrid, algo que quedaría patente en el minuto 24, cuando Gonzalo Higuaín terminaba de manera magistral una contra dirigida por Özil, secundada por Kaká. Ambos, alemán y brasileño, se entendieron a la perfección, por lo que lo de jugar juntos no parece tan extraño.
Después, el partido volvió a su origen: sin dueño y en empate. La gente disfrutaba y la emoción seguía por todo lo alto. Fútbol en su definición más sencilla.
Cuerpo a cuerpo.
El partido estaba tan abierto que el desarrollo del mismo podía variar en cuestión de segundos: desde un tiro de falta de Salva Sevilla que pegó en el larguero tras la mano salvadora de Iker Casillas, a un clamoroso fallo de Higuaín en la contra conducida por Kaká. Se iba el Madrid a vestuarios con el susto en el cuerpo, y el Betis como gran héroe, a pesar de restar 45 minutos de encuentro.
Un tiempo que se perdería Iturralde González, el colegiado del partido, que sintió molestas en el muslo y tuvo que ser sustituido en el tiempo de descanso. Fue la anécdota del choque.
Cristiano se hace notar...
En la segunda mitad, el Madrid no concedió tantas oportunidades al Betis, limitado en el balón parado, y sí controló más un partido casi incontrolable, como Cristiano Ronaldo, que había aparecido poco, pero tuvo la primera de la segunda parte, que fue gol en la primera subida de Marcelo, que habilitó el chut del portugués, que ya lleva seis partidos marcando. Otro rompe records.
...y Jefferson responde.
Dos minutos después del gol de Cristiano, cuando ya todo el mundo se preguntaba cuántos les podrían caer a los andaluces, Jefferson Montero disipó dichas preguntas, al empatar el partido a la salida de un córner tras un grave error de Arbeloa, que dejó la pelota muerta al borde del área chica, para que Montero disparasé y marcasé. Las jugadas a balón parado siguen siendo la asignatura defensiva pendiente del Madrid.
Se lucen los porteros y empieza la polémica.
El partido, a pesar del paso de los minutos, seguía a una alta intensidad, con ocasiones para ambos equipos, y con paradones de sus cancerberos respectivos. Primero Casillas rechazaba dos tiros consecutivos de Castro y Montero, y Fabricio sacaría después un remate cercano de Marcelo, que se estaba animando.
Tras esa última intervención, volvió a aparecer otra jugada polémica. Esta vez su protagonista era Xabi Alonso, que cometió una clara mano dentro del área, aunque del mismo sentido que la de Castro en el primer gol verdiblanco. Así que, mientras las dos se piten o no se pite ninguna, nadie puede sentirse perjudicado.
Cristiano impone su ley.
Perjudicado el Betis, sí, pero por Cristiano, autor del 2-3 definitivo, con un gol de killer tras aprovechar un balón suelto dentro del área. Siempre está donde el balón llega, y si no, llega él antes. Una máquina.
El Madrid, ya en los minutos finales, intentó conseguir la sentencia, pero estubo más pendientes de controlar al Betis, que no tuvo ninguna ocasión clara al final, que de dedicarse al ataque, a pesar de los cambios finales de Benzema o Callejón.
Ya en la última jugada, el ya comentado supuesto penalti de Ramos, que dará que hablar durante toda la semana.
Aunque lo único puramente cierto es que el Madrid sigue imparable, con 13 puntos de ventaja sobre el Barcelona, demostrando su poderío ofensivo y su fortaleza como equipo. Hoy, décima victoria consecutiva a domicilio, algo totalmente histórico.
LO MEJOR: Cristiano sigue a tope: el portugués está en estado de gracia. O quizá es que ese es su estado permanente. Su pelea individual con Messi es la leche.
LO PEOR: Iturralde y siervos, sin personalidad: ya se sabe como se las gasta el muy pronto ex-árbitro. Hoy el Betis salió perjudicado, y eso que el Madrid tampoco se fue contento, y cuando un árbitro deja descontento a ambos equipos, es que lo ha tenido que hacer rematadamente mal.
Nota Betis: 8
Nota Madrid: 8
Hombre del partido: Cristiano Ronaldo(9).
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